Mitla, ubicada en el corazón del estado de Oaxaca, es mucho más que una zona arqueológica: es un símbolo de la cosmovisión zapoteca sobre la vida, la muerte y la trascendencia. Su nombre deriva del náhuatl Mictlán, que significa “lugar de los muertos”, mientras que en zapoteco se le conoce como Lyobaa, o “lugar de descanso”. Esta dualidad lingüística refleja la profunda conexión espiritual que los antiguos habitantes establecieron entre el mundo terrenal y el inframundo.
Centro ceremonial de la cultura zapoteca
A diferencia de otras ciudades mesoamericanas centradas en el poder político o militar, Mitla se desarrolló como un centro ceremonial de gran relevancia. Durante el período Posclásico (750–1521 d.C.), se convirtió en la sede de la teocracia zapoteca, donde el sumo sacerdote ejercía tanto funciones religiosas como políticas. Esta figura era considerada un intermediario entre los dioses y los hombres, y su residencia en Mitla subraya la importancia espiritual del sitio.
Arquitectura única en Mesoamérica
Lo que distingue a Mitla de otros sitios arqueológicos es su arquitectura singular, caracterizada por la presencia de grecas: complejos diseños geométricos que adornan muros, frisos y tumbas. Estas grecas están formadas por miles de pequeñas piedras talladas con precisión y ensambladas sin el uso de mortero, creando patrones que aún hoy asombran por su perfección y simetría. Este estilo ornamental no tiene paralelo en Mesoamérica y es testimonio del alto grado de sofisticación alcanzado por los zapotecas en el arte de la construcción.
Los conjuntos arquitectónicos de Mitla
El sitio arqueológico de Mitla se compone de varios grupos arquitectónicos, entre los que destacan:
- Grupo de las Columnas: Aquí se encuentra el famoso Salón de las Columnas, sostenido por seis columnas monolíticas que alguna vez soportaron un techo de madera. Este espacio probablemente funcionó como sala de audiencias o residencia del sumo sacerdote.
- Grupo de la Iglesia: En este conjunto se erige la Iglesia de San Pablo, construida por los españoles sobre una plataforma prehispánica, simbolizando la superposición de culturas y creencias.
- Grupo del Arroyo, Grupo del Sur y Grupo del Adobe: Estos conjuntos, aunque menos conocidos, ofrecen valiosa información sobre la vida cotidiana y las prácticas funerarias de los antiguos zapotecas.
Tumbas cruciformes y el culto a los ancestros
Mitla es también notable por sus tumbas subterráneas en forma de cruz, que reflejan la importancia del culto a los ancestros en la cultura zapoteca. Estas cámaras funerarias, ricamente decoradas con grecas, eran reservadas para la élite y muestran la creencia en una vida después de la muerte, donde los difuntos continuaban desempeñando un papel activo en la comunidad.
Influencias mixtecas y resistencia cultural
A partir del siglo X, los mixtecos comenzaron a influir en la región, lo que se refleja en ciertos elementos arquitectónicos y decorativos de Mitla. Sin embargo, los zapotecas lograron mantener su identidad cultural, adaptando y asimilando las influencias externas sin perder su esencia. Esta capacidad de resistencia y adaptación es evidente en la continuidad de sus tradiciones y en la preservación de su lengua y costumbres hasta la actualidad.
Mitla en la época colonial y su transformación
Con la llegada de los españoles en el siglo XVI, Mitla experimentó una transformación significativa. Los conquistadores, al percibir el sitio como un centro de idolatría, destruyeron varios templos y edificaciones, utilizando sus materiales para construir iglesias y otras estructuras coloniales. A pesar de estos cambios, Mitla logró conservar gran parte de su patrimonio, y hoy en día es un testimonio vivo de la fusión entre las culturas indígena y europea.
Patrimonio cultural y reconocimiento internacional
En 2010, las Cuevas Prehistóricas de Yagul y Mitla fueron declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO, reconociendo su importancia como testimonio de las primeras comunidades agrícolas de Mesoamérica y su contribución al desarrollo de las civilizaciones prehispánicas. Este reconocimiento ha impulsado esfuerzos para la conservación y promoción del sitio, atrayendo a visitantes de todo el mundo interesados en conocer su rica historia y legado cultural.
Mitla en la actualidad: un puente entre el pasado y el presente
Hoy, Mitla no solo es un sitio arqueológico de gran relevancia, sino también una comunidad viva donde las tradiciones zapotecas continúan floreciendo. Los habitantes del pueblo mantienen prácticas ancestrales como la elaboración de textiles, la producción de mezcal y la celebración de festividades tradicionales. Esta continuidad cultural convierte a Mitla en un lugar donde el pasado y el presente coexisten armoniosamente, ofreciendo a los visitantes una experiencia única de inmersión en la historia y la cultura zapoteca.
Reflexión final
Mitla es un ejemplo excepcional de la riqueza y complejidad de las civilizaciones prehispánicas de Mesoamérica. Su arquitectura, arte y espiritualidad ofrecen una ventana al mundo de los antiguos zapotecas, permitiéndonos apreciar su visión del universo y su profundo respeto por la vida y la muerte. Visitar Mitla es, sin duda, una oportunidad para conectarse con una herencia cultural que sigue viva y vibrante en el corazón de Oaxaca.